El tipo está a punto de terminar la escuela secundaria. Él es el tipo deportista. Ya sabes, uno de esos tipos típicos del baloncesto. Alto, de hombros anchos y colgado como una bestia. A su madrastra, la atrevida pelirroja Alexis, loca por el fitness, le encanta el hecho de que su hijo sea tan activo. Él es muy popular entre las chicas y, a medida que pasaron los años, ella comenzó a entender por qué. Ni siquiera quiere ocultarlo: ¡sólo quiere esa increíble polla joven para ella sola! Hoy es su día para vivir su fantasía. Se lastimó la pierna jugando baloncesto y su sexy madrastra le trae un batido saludable. Él está un poco enojado, pero ella lo anima. Ella le muestra cómo estirarse. Sus fondos amarillos transparentes lo revelan todo. ¡Ella se agacha, asegurándose de que él pueda ver su coño y su culo! La MILF cachonda le hace agacharse con ella para que ambos puedan estirarse. Él está muy cerca. Ella siente que él se pone duro, se arma de valor y se acerca. Ella le agarra la polla y le dice que se relaje. El chico está un poco incómodo, pero le sigue el juego a su madrastra cachonda. Alexis, lenta pero constantemente, mete las manos en sus pantalones y saca esa polla que tanto anhela. MILF finalmente se pone a cuatro patas y mete su polla en su dulce coño. Se la folla a lo perrito sin piedad. Su madrastra tiene el culo de burbuja más grande y hermoso que jamás haya visto. Es incluso mejor de lo que imaginaba. Los jugos de su coño fluyen por toda su gruesa polla mientras cambian de posición. Ella lo cabalga con sus grandes tetas rebotando por todos lados. Su boca se siente mejor que la de todas las chicas juntas que le habían dado mamada. La toma en vaquera y luego en misionera. Alexis lo toma como la mamá cachonda que es. El chico se retira después de sólo veinte minutos y rocía a la mujer desnuda por toda su cara y sus grandes tetas.